AFAMMER entrega los primeros Premios Mujer Rural Vicenta Díaz

La Asociación de Familias y Mujeres del Medio Rural (AFAMMER) de Güímar entregó el viernes, 9 de mayo sus primeros Premios Mujer Rural Vicenta Díaz, unos galardones con los que se quiere homenajear a mujeres “anónimas” y que se entregarán en la Casa de la Cultura. Los premios tienen tres categorías, que son emprendeduría, sector primario y labor social, con los que se reconocerá a las güimareras Saray Herrera Pérez, Tomasa Correa González y María Lorenza López de Vera. La Asociación ha creado estos premios en homenaje a su socia de honor, Vicenta Díaz Sáez (quien fuera alcaldesa del municipio) y en reconocimiento al ímpetu y empeño que prestó para en crear AFAMMER Tenerife en el año 2006.  El acto tendrá lugar en la Casa de la Cultura de Güímar, en la plaza del Ayuntamiento, a partir de las 20:00 horas. La primera categoría premiará a una joven emprendedora, y será concedido a  aquella mujer que, por su iniciativa, haya sacado adelante una empresa, un trabajo innovador o una dirección o cargo relevante al frente de un negocio. En esta primera edición de los Premios Mujer Rural, se reconocerá en esta categoría a Saray Herrera Pérez, de 27 años, socióloga y propietaria de La Dulcería, ubicada en la plaza de Las Flores. El segundo premio está orientado a mujeres dedicadas a la agricultura, ganadería o trabajos relacionados con el sector primario, con una larga trayectoria. La galardonada será Tomasa Correa González, de 52 años, quien gestiona la finca familiar en la zona de los Rempujones, que ha sabido adaptarse a las necesidades de mercado, ha participado en la Red de Mujeres Rurales y Urbanas en la feria celebrada en Sevilla y actualmente vende en el Mercadillo del agricultor de Güímar, donde innova con nuevos productos. La tercera categoría está destinada a mujeres que, a lo largo de su vida, hayan realizado una labor social y colaboradora, en beneficio de la comunidad y de forma altruista. Este premio recaerá en María Lorenza López de Vera, de 79 años, quien durante décadas llevó una venta en San Pedro Abajo, donde ayudaba en lo que podía a sus vecinos, fiando hasta que le pudiesen pagar o no cobrando algunas cosas a quien lo necesitaba. Desde hace unos 15 años, colabora desinteresadamente con el Ayuntamiento de Güímar colocando las mantillas a la reina de las fiestas de San Pedro y su corte de honor, para la procesión en la que se traslada el pendón.