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La directora General del Instituto de la Mujer y para la Igualdad de Oportunidades, Rosa Urbón Izquierdo, aseguró ayer que de la violencia de género se sale”. Con esta frase Urbón lanzó un mensaje de esperanza para las mujeres que sufren este tipo de violencia, durante su participación en la mesa redonda ‘Eficacia de las medidas de protección a las mujeres víctimas de violencia de género’, celebrada ayer y organizada por Afammer Tenerife y la Concejalía de Bienestar Social del Ayuntamiento de Güímar.
En esta mesa estuvo acompañada de Yolanda Baumgartner Hernández, jefa de la Unidad contra la Violencia sobre la Mujer de la Subdelegación del Gobierno en Santa Cruz de Tenerife, Cristina Valido García, vicepresidenta Segunda del Cabildo Insular de Tenerife y consejera del Área de Gobierno Abierto, Acción Social y Atención Ciudadana, Julieta Martín Sá, directora de la Unidad Orgánica de Violencia de Género del Instituto Insular de Atención Social y Sociosanitaria y María del Socorro González Reyes, concejala de Bienestar Social, Educación, Sanidad y Juventud del Ayuntamiento de Güímar.
La apertura y clausura de la mesa corrió a cargo de Carmen Luisa Castro Dorta, alcaldesa del Ayuntamiento de Güímar, y fue moderada por María del Pino del Rosario Delgado, presidenta de Afammer.
Tras hacerse un recorrido por los recursos dirigidos a la atención de las mujeres y menores víctimas de la violencia de género, tanto del Cabildo de Tenerife como del Estado, se facilitaron algunas cifras que revelan que pese a los grandes pasos producidos en los últimos diez años, sigue siendo un grave problema del que sólo se ve la punta del iceberg.
“Este año han fallecido 48 mujeres y 44 niños y niñas han quedado huérfanos”, destacó Yolanda Baumgartner, quien apuntó que en Canarias se hace seguimiento a unas 27.000 mujeres. Desde la Subdelegación del Gobierno se abogó por un mayor uso de los soportes tecnológicos de protección para estas mujeres como son las pulseras o el servicio Atenpo, entre otros.
Por su parte, Cristina Valido destacó el trabajo que hacen las personas que forman parte de los equipos de apoyo a estas mujeres, al que aseguró hay que sumar una mayor implicación social, con el único fin de “reivindicar el derecho a la vida”. Valido lamentó los numerosos mensajes sexistas que reciben los jóvenes a través de la música o de programas de televisión, “ante los que nadie se escandaliza”. En este sentido Urbón indicó que cada año se reciben 600 denuncias por campañas con contenidos sexistas.
Por su parte la concejala de Bienestar Social destacó que “la violencia contra la mujer no es un problema de la mujer, sino un problema que padece la mujer”. Mientras que la presidenta de Afammer fue la encargada de leer un manifiesto en el que se pide el compromiso social para que las mujeres del mundo rural puedan romper el silencio con el que viven la violencia de género y una mayor implicación de los padres, madres, profesores y administraciones para promover una educación en igualdad. |
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