Se me llenan los ojos de lágrimas todavía cuando recuerdo a Vicenta Díaz, el otro día en el Acto del Pregón me emocione al recordar las personas que ya nos han dejado.
Gracias a ella, soy hoy Alcaldesa de Güímar, recuerdo todavía sus consejos, como disfrutaba de la política como quería a su pueblo y sus gentes.
En estos días me ha pasado algo curioso, cuando me llaman Alcaldesa es inevitable acordarme de Tita.
Gracias Tita, por transmitirme tus valores, por creer vehemente en el pueblo de Güímar, por ayudarme con tus sabios consejos. Creo que desde allá arriba nos estas ayudando porque cada vez que tengo que tomar una decisión importante me acuerdo de lo que decías “que había que mirar los asuntos, de todos los puntos de vista y no apresurarse a tomar decisiones que hagan daño a los vecinos”.
Guardo cada día esos recuerdos bien dentro de mi corazón. Son mi tesoro. Cuando estoy sola, vienen a mí mente esos recuerdos que me acompañan.
Gracias por el tiempo y los momentos que me has regalado! Siempre estarás con nosotros ¡
Con Cariño:
Carmen Luisa Castro
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